La búsqueda del arma homicida y la investigación del entorno de la víctima son las prioridades que se ha marcado la policía a la hora de esclarecer las circunstancias de la muerte de la mujer de mediana edad hallada el viernes en Fuengirola con una herida de arma blanca en el tórax. La fallecida, de nacionalidad rusa, trabajaba y vivía en el domicilio donde perdió la vida, cuidando a un anciano discapacitado.
La fallecida, cuyas iniciales son Y.M.,
trabajaba y al parecer también residía en la vivienda, cercana al parque del
Rosario y al recinto ferial de la localidad. Se encargaba de cuidar a un
anciano discapacitado con más de 90 años que está postrado en la cama, lo que
descarta cualquier relación con el caso. Fue la hija de este hombre la que
encontró a la víctima. Cuando se personaron en el piso los policías, la puerta
principal de acceso estaba cerrada y sin aparentes signos de que hubiesen
intentado forzarla para acceder a la vivienda.
Varios vecinos afirmaron que en ningún momento
habían escuchado ruidos aque les alertase de lo ocurrido, motivos por los
cuales los investigadores buscan pistas en el entorno de la víctima, aunque de
momento siguen abiertas todas las líneas de investigación.
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